EXPANSIÓN EVANGÉLICA EN ARGENTINA
Así es, el Cristo de los evangélicos está sujeto al libre examen que ellos practican, donde la libertad está por encima de la verdad, y por esa razón, Jesucristo es un Dios misericordioso y permisivo que deja hacer libremente, respetando la buena voluntad de los individuos. Al llegar a Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: “¿Qué dice la gente sobre el Hijo del hombre? ¿Quién dicen que es?”. Cuidado hermanos con el Cristo que presentamos, porque a la revelación de Pedro le siguió de inmediato la severa reprensión del Maestro por su negación al anuncio del martirio en la cruz.
Estas Iglesias cristianas no poseen una unidad espiritual, no deben obediencia a una sucesoria autoridad instituida y no están condicionadas por una recta doctrina que les imponga deberes y límites a su libre accionar. Es una práctica religiosa sencilla y fácil de cumplir, donde lo que vale es mi subjetiva fe en Jesús, sin necesidad de respetar formalidades litúrgicas ni rendir cuentas de nada y a nadie a través de sacramentos que comprometen mi vida. En estos tiempos modernos, una religión que no exige nada y comprende todo es ideal para satisfacer el vacío espiritual, pero no lo es para aceptar el misterio de la Cruz. Las consecuencias de esta actitud son innumerables. Por ejemplo: “la cercanía a la gente y la calidez” en el trato con los demás, corre el riesgo de caer en mero sentimentalismo cuando no actúo como Cristo y no veo a Cristo en el otro, “Sin verdad, la caridad cae en mero sentimentalismo. El amor se convierte en un envoltorio vacío que se rellena arbitrariamente” dice el papa Benedicto. Si no comprendo la paradoja de la Cruz – morir para vivir-, si no estoy dispuesto a cargarla dejando de lado mi criterio y conveniencia, será muy difícil practicar la caridad evangélica. Los fieles debemos asumir el problema del mal, vale decir, el sufrimiento, el dolor y la muerte como medios necesarios para alcanzar la beatitud perdida por el pecado original.
Texto del libro "¡Cristo nos mira!"
EXTRACTO DEL PRÓLOGO DE LA COPILACIÓN DE LA “SUMA ANTIMODERNISTA” QUE CONTIENE A LAS PRINCIPALES ENCÍCLICAS PONTIFICIAS, REFUTANDO Y CONDENANDO A LAS FALSAS DOCTRINAS E IDEOLOGÍAS MODERNAS DESDE EL S. XVIII HASTA NUESTROS DÍAS.
Otros muchos documentos no hemos incorporado a esta recopilación, para no hacerla más gruesa de lo preciso. En más de uno de estos documentos se trata específicamente de la pestilencia socialista y masónica. Comoquiera que estas dos plagas se encuentran entrelazadas una con otra (muchos son los diputados y senadores masones), y comoquiera que gran parte de los gentiles, nuevos apostatas, y lo que es peor, parte también de los católicos, comulgan con sus torcidos principios, nos parece conveniente dejar explícitamente señalados algunos puntos:
Primero: que el catolicismo es irreconciliable tanto con el socialismo como con la masonería, enemigos mortales de la Iglesia. Que nadie se engañe. Hoy no esperamos encontrar activistas mal vestidos de modales zafios hablando de revoluciones. Hoy encontramos socialistas y masones de clase media o alta, elegantemente vestidos y que se expresan de forma menos agresiva (aunque quizás más vacía). Pero los objetivos siguen siendo los mismos, y los medios de que disponen hoy son ciertamente formidables, y su conocimiento de las masas, de cómo manipularlas, sugestionarlas, moldearlas, ha mejorado de forma sustancial con el paso del tiempo. Pero es que, además, no han renunciado de ninguna forma a los métodos violentos de otros tiempos. Simplemente, hoy pueden administrar la violencia de forma más sutil, y usarla en un punto u otro de la Tierra, según lo aconsejen las circunstancias. Hoy quizás no sea conveniente para ellos torturar y asesinar católicos en Europa como lo hicieron hace pocas décadas. No importa: torturan y asesinan en otros lugares.
Segundo: que ni uno ni otro han depuesto en lo más mínimo su propósito declarado de erradicar a la Iglesia de la faz de la Tierra. Hoy, todas las fuerzas del mal confluyen contra la Iglesia: socialismo, masonería, capitalismo, islam, sectas, instituciones internacionales, parlamentos nacionales, la inmensa mayoría de los medios de adiestramiento del pueblo-rebaño, como la prensa y la televisión, etc.
Tercero: que no deben los católicos, de cualquier condición, dejarse engañar por las palabras de estas sectas, ya que, adiestrados por el mismo demonio, son dos las principales formas en que pierden a los católicos. Una, proponiendo principios de por sí monstruosos, pero envolviéndolos en palabras blandas y halagadoras, y con frecuencia invocando y haciéndolos pasar por altos ideales. Otra, que no usan el lenguaje en sentido recto. Así, cuando dicen “justicia”, o “paz”, o cualquier otra cosa, ¿quién no estaría de acuerdo en desearlas?; pero, adviertan los católicos cómo luego, con el poder en sus manos, ponen en práctica estos principios.
Cuarto: que muchos católicos, sin abandonar su fe, han sido inadvertidamente movidos para aceptar principios abstractos aparentemente saludables, de los cuales a continuación se siguen consecuencias funestas por necesidad lógica. Entran estos católicos por la vía del matadero, sin advertirlo. Y muchos que han nacido ya en ambiente pagano simplemente no conciben que las cosas puedan ser de otra forma, con lo cual, al error que se difunde mediante la educación, la televisión y mil medios más, se une a una ignorancia casi absoluta de la Historia (sustituida por una versión falsa, puramente ideológica), que cierra toda perspectiva más elevada.
Quinto: es de deplorar especialmente la contaminación del clero y de muchas Instituciones de vida religiosa. Hoy, con frecuencia, los enemigos de la Fe celebran Misa. Unos mutilan el mensaje evangélico, escondiendo verdades que conviene conocer y que son parte esencial de este mensaje. Otros se han adherido a desviaciones ya condenadas, como el arrianismo o el pelagianismo. Otros se han dejado seducir por las propuestas socialistas o masónicas. Otros, en fin, hay que han asimilado la propaganda anticatólica. Otros, queriendo parecer sabios, se predican a sí mismos, a su supuesta erudición, y se despachan contra las sencillas devociones del pueblo fiel, que son de una profundidad que ellos ni sospechan, envanecidos muchas veces precisamente en la ciencia profana de los libros de los enemigos de Cristo.
Sexto: Los católicos deben rechazar los principios sociales imperantes, y en particular aquellos que establecen que la religión debe ser expulsada del Estado. Y deben rechazar este principio en concreto porque es por cuadruplicado falso. Primero: porque la Historia enseña que la sustancia de las civilizaciones es la religión, y que si ésta se seca la civilización desaparece. Segundo: porque, sentado el hecho histórico anterior, se sigue que una religión sólo puede ser sustituida por otra. Así, a la decadencia del catolicismo en occidente vemos que ha seguido el crecimiento sin tasa del islam. Más todavía, todos estos principios masónicos se quieren constituir en una verdadera religión de corte naturalista (New Age). Tercero, porque, esta nueva religión está impulsada precisamente desde los parlamentos e instituciones internacionales, y son incontables los masones que ocupan ya puestos de poder. Si se les aplicasen los mismos principios que quieren para el catolicismo, ninguno de ellos tendría derecho a estar donde está, ¿o acaso desde sus puestos no imprimen en las leyes del Estado los presupuestos de su religión? Cuarto: porque la persona es una, y es contra natura pretender que la Fe quede reducida al ámbito personal; que los ciudadanos puedan ser clandestinamente católicos y a la vez que tengan que admitir leyes inicuas, injustas y perversas, contrarias a la Ley de Dios. Los católicos deben reclamar un Estado católico, ya que si un Estado se fundamenta en la verdadera justicia y caridad, en la verdadera naturaleza de la persona humana, se seguirá el bien común, y precisamente la razón de ser del Estado es el bien común.
Séptimo: los católicos han de ser consecuentes con su religión. Esto no sólo quiere decir que han de practicar su religión, sino que han de adherirse a las consecuencias lógicas que se derivan (aceptar la cruz de Cristo como medio de salvación). Porque, o bien existe un Dios, o bien no existe. Pero si existe un Dios, o bien todas las religiones son falsas, o bien hay una y sólo una que es la verdadera. Los católicos han de saber que la suya es la religión verdadera, y rechazar cualquier pretensión en sentido contrario. En particular, deben rechazar en primer lugar el indiferentismo religioso y deben rechazar eso que los enemigos de Cristo llaman “multiculturalismo” o pluralismo. Pues la única forma de que puedan convivir culturas diferentes es vaciándolas de todo lo que las hace efectivas, es decir, reduciéndolas a puro folclore. Así que los abogados del multiculturalismo son en realidad enemigos de toda cultura. Al contrario, la religión católica, por ser universal, trasciende y perfecciona toda cultura, y es por eso genuinamente multicultural.
Octavo: el católico ha de estar en guardia. Así como el “multiculturalismo” es un fraude contra las culturas, el enemigo usa versiones falsificadas de muchas otras palabras nobles, como libertad, igualdad, amor y otras muchas. Es preciso que el católico sepa distinguir entre el concepto verdadero y el concepto falso, acuñado en las sentinas de las sectas para enturbiar las fuentes del entendimiento, que se basa en el discurso, que a su vez requiere la correspondencia entre los términos y la realidad de las cosas. Qué duda cabe que las voces usadas por las distintas lenguas son convencionales, pero no es en absoluto convencional la correspondencia entre el concepto que la voz representa y la realidad que quiere designar. Por la alteración de las palabras es como se alteran primero los conceptos y después la propia realidad.
Los católicos no debemos responder con agresiones sino con oraciones, allí radica nuestra fortaleza
Queridos hermanos: Cristo no nos enseñó a agredir u ofender a nadie sino, por el contrario, con su ejemplo de Cruz nos enseñó a amar al prójimo y al enemigo. Nuestra misión es predicar el Evangelio para que todos los hombres se encuentren con Jesús, y de esa manera puedan salvar sus almas. La lucha contra el enemigo, que "no es de carne y sangre" debemos realizarla con "las armas de Dios" no, con las armas de los hombres. La lucha es espiritual no carnal, y en ese plano sí, al maligno no hay que darle tregua.
A los Sres. Obispos y católicos en general:
A ellos les queremos recordar estas palabras de León XIII escritas en su encíclica Sapientiæ Christianæ (sobre los deberes de los ciudadanos cristianos)
"Porque en tan grande y universal extravío de opiniones, deber es de la Iglesia tomar el patrocinio de la verdad y extirpar de los ánimos el error; deber que está obligada a cumplir siempre e inviolablemente, porque a su tutela ha sido confiado el honor de Dios y la salvación de las almas.
Pero cuando la necesidad apremia no sólo deben guardar incólume la fe los que mandan, sino que “cada uno esté obligado a propagar la fe delante de los otros, ya para instruir y confirmar a los demás fieles, ya para reprimir la audacia de los infieles”.
Pero cuando la necesidad apremia no sólo deben guardar incólume la fe los que mandan, sino que “cada uno esté obligado a propagar la fe delante de los otros, ya para instruir y confirmar a los demás fieles, ya para reprimir la audacia de los infieles”.
Ceder el puesto al enemigo, o callar cuando de todas partes se levanta incesante clamoreo para oprimir a la verdad, propio es, o de hombre cobarde o de quien duda estar en posesión de las verdades que profesa. Lo uno y lo otro es vergonzoso e injurioso a Dios; lo uno y lo otro, contrario a la salvación del individuo y de la sociedad: ello aprovecha únicamente a los enemigos del nombre cristiano, porque la cobardía de los buenos fomenta la audacia de los malos.
Finalmente, a todos es dado oponer y mostrar aquella fortaleza que es propia de los cristianos, y con la cual no raras veces se quebrantan los bríos de los adversarios y se desbaratan sus planes.
Fuera de que el cristiano ha nacido para la lucha, y cuanto ésta es más encarnizada, tanto con el auxilio de Dios es más segura la victoria. “Confiad: yo he vencido al mundo”.
Y no oponga nadie que Jesucristo, conservador y defensor de la Iglesia, de ningún modo necesita del auxilio humano porque, no por falta de fuerza, sino por la grandeza de su voluntad, quiere que pongamos alguna cooperación para obtener y alcanzar los frutos de la salvación que Él nos ha conquistado".
ATAQUES A CATEDRALES
Corderos que son leones
En el relato bíblico el cordero es la víctima inmolada y ofrecida a Dios como sacrificio expiatorio por las ofensas de los hombres. En el nuevo testamento Jesucristo, como Hijo de Dios, asume ese destino y se convierte en la última y definitiva víctima, es el cordero inmolado para redimir a toda la humanidad.
La persecución religiosa comenzó y va en aumento, quien no lo ve así está muy atado al mundo, ergo, está ciego. No es tiempo para tibios. Dice un sabio monje y sacerdote: “no necesitamos monjes, necesitamos mártires”, y mártir es el “que soporta injurias por su causa”, hasta la muerte si es necesario por fidelidad a Jesucristo. Este es el temple requerido para los cristianos del fin de los tiempos, el mismo que mostró nuestro Señor en Getsemaní y en la Cruz, y el que tuvieron los discípulos al final de sus vidas; el fin de los tiempos también es el fin de nuestras vidas.
Los ataques perpetrados por las organizaciones abortistas y homosexuales contra las catedrales de La Plata y Posadas mostraron la cara del mismo Diablo acechando las puertas de la Iglesia. Las tribulaciones de las que hablaba Cristo hacia el final de los tiempos ya son realidad, y se intensificarán en cantidad y crueldad.
Con mucho odio a Dios y a su Iglesia quienes reclamaban sus “derechos” humillaron con insultos, vejaciones y violencia a un pequeño grupo de CATOLICOS autoconvocados para defender la fe y la Casa de Dios. “Si la Cabeza no tiene dónde reposar (Mt 8,20), ¿descansarán los miembros entre plumas y edredones?” pregunta
San Luis María Grignion de Montfort en “Carta a los Amigos de la Cruz”. Aquel reducido grupo de varones y mujeres soportaron lo insoportable por amor a Jesús. Ellos son los mártires del modernismo, ellos son los corderos que dejaron sin discurso ni argumentos a sus agresores. Estos corderos nos mostraron la manera de luchar contra los enemigos de Dios, pues, es imposible enfrentarse a un enemigo espiritual con armas humanas. A un enemigo espiritual no se lo puede enfrentar con proyectos políticos o con estructuras sociales, la verdadera salvación proviene del interior del hombre. Hay que enfrentarlo con una sólida formación espiritual, para que podamos derrotarlo como lo hizo Jesús, desde el desierto hasta la Cruz.
Nadie duda que estemos transitando tiempos muy difíciles, y antes que mejorar, la situación va a empeorar. No nos dejemos engañar, la única manera de intervenir para cambiar esta sociedad enferma es cambiando nosotros, convirtiendo nuestro corazón, configurándonos con el Maestro, orando y anunciando el Reino con obras; combatiendo al enemigo en todas partes, utilizando las “armas de Dios”. En síntesis, como decía el ilustre padre Castellani: “Si quieres salvar a la patria salva tu alma, ni antes ni después sino al mismo tiempo”.
Daniel Elía
Un interrogante que desafía a la religión y la filosofía "La paradoja del mal" por Diana Cohen Agrest para LA NACION.
Un interrogante que desafía a la religión y la filosofía "La paradoja del mal" por Diana Cohen Agrest para LA NACION.
Refutada por Daniel Elía
La Dra. Diana Cohen Agrest escribió para el diario La Nación – Opinión un artículo titulado “La Paradoja del mal”, publicado el día 3 de enero de 2012. Con pobres elucubraciones humanas, deficiente interpretación de las Sagradas Escrituras y escaso conocimiento de la doctrina católica como de sus autores, se lanzó a la palestra a hablar sobre el mal y, no quedando del todo satisfecha, cuestionó al mismo Dios su suprema bondad, omnisciencia y omnipotencia. El hilo conductor del discurso está basado en un libro: “Dios no es bueno”, escrito por el blasfemo –calificativo empleado por la Dra.- y recientemente fallecido Chistopher Hitchens. Desde este trampolín se precipitó en una serie de conclusiones desquiciadas, citas de autores y un ejemplo poco feliz como el libro de Job.
Ya en el segundo párrafo con increíble ligereza y falsa lógica sugiere, con el inconfundible estilo del ateo Paolo Flores d’Arcais, que Dios no es bueno siendo indiferente al mal o impotente para evitarlo. Desde el comienzo adopta una cierta empatía con Hitchens.
Para nos los católicos, el mal no es una paradoja es un dogma y en ese sentido el artículo 391 del Catecismo enseña lo siguiente: “Detrás de la elección desobediente de nuestros primeros padres se halla una voz seductora, opuesta a Dios (cf. Gn 3,1-5) que, por envidia, los hace caer en la muerte (cf. Sb 2,24). La Escritura y la Tradición de la Iglesia ven en este ser un ángel caído, llamado Satán o diablo (cf. Jn 8,44; Ap 12,9). La Iglesia enseña que primero fue un ángel bueno, creado por Dios. Diabolus enim et alii daemones a Deo quidem natura creati sunt boni, sed ipsi per se facti sunt mali ("El diablo y los otros demonios fueron creados por Dios con una naturaleza buena, pero ellos se hicieron a sí mismos malos") (Concilio de Letrán IV, año 1215: DS, 800)”. También el Evangelio en distintos pasajes hace referencia a un ser maligno, como en (Mt 4, 1-11) donde el evangelista nos relata las tentaciones de Satanás a Jesús: “Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el demonio”. La identidad del mal está explícita en toda la Biblia; por lo tanto, es nuestra profesión de fe identificar al mal con un ser espiritual maligno.
La escueta cita de san Agustín que realiza la Dra. Agrest está mal interpretada y sacada del contexto de sus abundantes obras, en las cuales, su pensamiento se manifiesta en total concordancia con el magisterio de la Iglesia y más aún, aportan un importante fundamento teológico a su doctrina. El obispo de Hipona consideró el mal como deficiencia, como no–ser. Vale decir, “que el mal no es una entidad autónoma, sino que sólo es imaginable como negación de un ser en realidad bueno. La mera negación no puede existir” (Joseph Ratzinger, Dios y el Mundo, Ed. Sudamericana, pág. 117). El artículo 2851 del catecismo afirma: “El mal no es una abstracción, sino que designa una persona, Satanás, el Maligno, el ángel que se opone a Dios. El “diablo” (diá-bolos) es aquél que “se atraviesa” en el designio de Dios y su obra de salvación cumplida en Cristo”. El mal es una persona, un ser con inteligencia, voluntad y libertad para actuar hasta donde Dios lo permita.
Es todavía propicio hacer una diferenciación del mal que la articulista soslayó, culpando a Dios de todo el sufrimiento humano. El mal físico. La raíz de este mal está en la debilidad e imperfección de la criatura, sujeta a cambios y a mutaciones que pueden llevar a la destrucción total y a la muerte. De este modo, la causa de los males físicos es la naturaleza misma. Todos los seres son buenos porque vienen de un Dios bueno. Pero son sustancias inferiores a ese ser del cual proceden, por lo que están expuestas a la corrupción -privación de bien-. Si estas criaturas no fueran imperfectas, serían Dios y Dios sólo hay uno, que es el Creador. Si Dios es omnipotente y bueno, ¿por qué permite que sus criaturas padezcan sufrimientos? El dolor pertenece a las criaturas sensibles como consecuencia de su naturaleza.
El mal moral. Si Dios puede permitir el mal físico para sacar un bien mayor para el hombre, no puede, sin embargo, querer o permitir el mal del espíritu. El mal espiritual o moral no puede provenir de un principio malvado, como atestiguaban los maniqueos, ya que el mal existe en cuanto existe previamente el bien. En realidad, la causa y el origen del mal moral es el hombre mismo, su voluntad malvada, herido por el pecado original. Concluyendo, la Iglesia entiende que el hombre puede ser tentado para obrar este tipo de mal por tres vías: por el demonio, por el mundo y por la carne. Quien envenena todo no es la religión es el hombre con su mala voluntad.
“Ignorar que el hombre posee una naturaleza herida, inclinada al mal, da lugar a graves errores en el dominio de la educación, de la política, de la acción social y de las costumbres”. (Catecismo de la Iglesia Católica, 407; cf. Juan Pablo II, Carta Enc. Centesimus annus).
El libro de Job. Nuevamente, nuestra estimada doctora recurre a un libro “Cuando la gente buena sufre” escrito por el rabino Harold Kushner para dejar mal parado a Dios frente al hombre. En principio, debo aclararle al rabino Kushner que, para los católicos, Dios es el autor de las Sagradas Escrituras y por ende, el autor del libro de Job. Dicho motivo permite que crea, sin duda alguna, en su propia bondad y omnipotencia. Este maravilloso libro poético-didáctico gira en torno a la tragedia de un justo, no israelita – se supone vivió en Edom entre “los hijos de Oriente”-, que fue sometido a terribles pruebas por Dios para aquilatar su virtud desinteresada. El problema teórico que se plantea es el de la razón del sufrimiento del justo en esta vida, cuestión que ha sido estudiada en las diversas literaturas de la antigüedad. En lugar de plantear el problema en abstracto, se prefiere presentar la historia de un justo irreprochable. Por lo tanto, Dios, no se dio el lujo de apostar con el diablo. A pesar de su acrisolada virtud Job acepta resignado la prueba “pues todo viene de Dios: lo bueno y lo malo”; lo bueno para gratificar y lo malo para fortalecer el espíritu. La tesis tradicional en la sociedad israelita era que Dios premia en esta vida la virtud y castiga el vicio. A los cumplidores de la ley divina les están reservados toda clase de bienes temporales, mientras que a los pecadores les espera la muerte prematura y la pérdida de bienes, entre otras cosas. Por otra parte se establecía una relación causal entre el pecado y el sufrimiento, de forma que todo el que sufría contrariedades de orden físico o moral tenía por causa indefectible el pecado. La historia del justo Job será la prueba irrefragable de que esta tesis no tiene validez en todos los casos y, por tanto, no se debe atribuir necesariamente la desventura y la enfermedad al pecado como causa propia. Los designios de la Providencia son misteriosos, por lo cual, no deben aventurarse juicios temerarios sobre la culpabilidad del que sufre. El enigma del justo, queda sin resolver: los sufrimientos de esta vida encuentran su compensación en los premios y gozos de la eterna. También el castigo de los impíos por los males causados. Estimado rabino: Job sufre por Dios. Su dolor no es vano, es sublime, con sus penurias alaba y glorifica a su creador. ¡Eh ahí su fe!, y su virtud triplemente recompensada. ¡Qué chasco se debe haber llevado don Chistopher!, al comprobar en el más allá que Dios existe y es bueno pero, un juez implacable.
Ahora bien, ¿Qué es una paradoja? Una paradoja es una aserción inverosímil o absurda, que se presenta con apariencias de verdadera. ¿Qué se presenta aquí como inverosímil o absurdo sino lo predicado por la doctrina de la Iglesia Católica que se intenta refutar?
Dios, el creador infinitamente bondadoso, omnisciente, omnipotente y, misericordioso, creó el universo y a todas sus creaturas libres y esa libertad es la misma que tiene un perro para morder; la naturaleza para desatar un tsunami o el hombre, para dañar a su prójimo. Para Dios no hay nada imposible mas, respeta nuestra libertad, por esa única y simple razón no interviene según nuestros demandantes caprichos; interviene, de acuerdo a su divino parecer.
Por último, Dios no tiene nada que demostrar ya dijo e hizo todo lo que tenía que hacer y decir: “Esta generación malvada y adúltera reclama un signo, pero no se le dará otro signo que el de Jonás” (Mt 16, 4). Tanto amó Dios al mundo que envió a su propio hijo para sufrir cómo y con nosotros el desamparo y el dolor. Cristo, el hijo de Dios hecho hombre, fue el cordero sacrificado que padeció una vez y para siempre por todos nuestros pecados y esto, no es ningún absurdo.
El mal tiene entidad, el príncipe de las tinieblas. Así lo define Jesús y con él se enfrentó en el desierto antes de comenzar su vida pública. Jesús rechazó la tentación del demonio y nos enseñó a superar el mal. Sólo identificándose con Cristo el hombre puede enfrentar el mal, o sea, el dolor, el sufrimiento y la muerte. Él es el mesías que venció al mundo y a la muerte.
Estimada doctora: ¿A qué público blanco dirige estos intrincados razonamientos? ¿Cuál es su intención? Ciertamente busca confundir e infundir des-esperanza, ya que rebaja la fe a un tibio consuelo terrenal e induce a “aceptar el orden ciego de una naturaleza contingente que no sabe ni del bien ni del mal” lo cual sería una peligrosa ignorancia, un panteísmo que justificaría cualquier acto, sea éste bueno o malo. Si UD. y sus referentes desean una respuesta inteligible, un mundo ideal sin sufrimientos ni catástrofes, pues deben buscarla en el libro del Génesis, antes del pecado cometido por nuestros primeros padres, allí en el paraíso, el hombre vivía en plena felicidad, según lo añora desde su destierro.
Decía santa Teresa de Jesús:
En la cruz está la vida y el consuelo,
y ella sola es el camino para el cielo.
¡Que Dios la bendiga!
____________________________________________________________HUMANOS SIN DERECHOS...
¡La tracción a sangre está prohibida!
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| No hermano, no; no es un cartonero es Cristo, cargando su cruz |
- Sin derecho a un trabajo salubre.
- Sin derecho a una justa remuneración: le pagan entre $0.18 y $0.25 el kilo de cartón. El intermediario lo vende desde $1.50 hasta $ 2 el kilo.
- Sin derecho a una legislación que regule la actividad para evitar la explotación y brindar condiciones humanas de trabajo, por ejemplo: un carro que evite la tracción a sangre y con señalización de seguridad adecuadas al tránsito; locales ubicados estratégicamente en cada barrio o zona para recibir la mercadería y no, móviles, que fomentan la explotación.
- Sin derecho al debido respeto de la integridad física. La prepotencia, la imprudencia y el desprecio es moneda corriente entre los conductores.
- ... sin derechos.
Hay tres actitudes ante un problema: 1) no pensar en él; 2) negarlo; 3) afrontarlo.
¡Señores legisladores ésta es
vuestra responsabilidad!
Si no saben qué hacer, en este Blog, con mucho gusto, les diremos cómo hacerlo.
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"AVANZA EL COMUNISMO
A PASO REDOBLADO..."
3. El terrorismo argentino quiere vengar a los comunistas españoles. Sembraron la muerte, fueron vencidos y ahora, aparecen como inocentes víctimas.
¡¿Comunismo y "derechos humanos"?!
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| 22 religiosos y un laico fusilados por los comunistas en 1936 |
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| Fusilamiento del Sagrado Corazón de Jesús por comunistas españoles |
"MATÓ A MI PADRE"
Habiendo llegado en forma fortuita a mis manos un ejemplar del diario Página 12 con fecha 19 de noviembre próximo pasado, leo con asombro que figura como desaparecido Sergio Gustavo Dicovsky desde el 19 de noviembre de 1974.
A fin de colaborar con los organismos de Derechos Humanos en ésta búsqueda, va mi aporte:
Sergio Dicovsky fue quien asesinó a mi padre (según consta en prensa de la época y distinta bibliografía), en un control de ruta en Francisco Solano, justamente el 19 de noviembre de 1974.
Mi padre era trasladado, en una camioneta manejada por él, de una cárcel del pueblo a otra dentro de un armario metálico. Se produce un enfrentamiento con la Policía. Entonces, antes de entregarse, lo mata de 5 disparos con una pistola Magnum 357.
A lo mejor, este dato que les acerco les es de gran utilidad como para empezar a buscarlo.
En la foto publicada, puedo observar en su cara una expresión de ternura y candidez… y claro, era un joven idealista.
Asimismo, quiero expresar mi profundo malestar con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, por homenajear una vez más, en el Parque de la Memoria, a un terrorista que no sólo atacó las Instituciones de la República, sino también a personas y niños inocentes.
Silvia Ibarzábal
Presidente Asoc. Familiares y Amigos de Víctimas del Terrorismo de Argentina
____________________________________________________________"LUCES QUE NO SE APAGAN"
-Posted: 10 Oct 2011 03:01 PM PDT-
Testimonio de un seminarista chino
¿Cómo viven los seminaristas en China? Es difícil de contestar, ya que, dependiendo a la situación de cada diócesis, cambia el modo de vivir en el seminario. Lo que voy a decir sobre mi seminario es un pequeño reflejo de los seminarios clandestinos.
Cuando entré en el seminario, éramos casi 30 chicos, procedentes de tres lugares diferentes del país. Nosotros, el curso más joven –casi todos teníamos 17 años – vivíamos en una cueva, construida por los seminaristas mayores en una montaña tan alta que nos parecía vivir en el cielo. Aquella era nuestra capilla, nuestra aula de clase, y también el comedor.
Debajo de nosotros había una aldea, de unos 100 habitantes, todos católicos. Eran los que nos protegían, y los que nos subían el arroz, la harina y las verduras. Durante la semana, no teníamos mucho tiempo libre, porque había que aprovechar las horas al máximo, pues allí nadie sabe cuánto puede durar un curso. De lunes a viernes, teníamos ocho clases diarias, con asignaturas muy variadas. Los sábados hacíamos la limpieza, y los domingos podíamos salir a hacer una pequeña excursión por la montaña. El tiempo de formación antes eran cinco años; ahora son diez, como mínimo.
El primer año vivimos muy felices en aquella cueva, nadie se quejó de la humedad ni de la comida, pues el amor fraterno lo suple todo. La oración y el estudio son nuestra tarea principal, porque sabemos que Cristo necesita soldados bien armados de ciencia y de santidad para extender su reino en China. Cuando alguno está enfermo, o le duele el estómago, o la pierna –porque hay mucha humedad–, el formador suele decirle bromeando que son síntomas de vocación, porque casi todos los curas tienen tales enfermedades. ¡Pues, ya ves cómo Dios confirma la llamada! Nosotros sabemos que el dolor de estómago del formador es debido a la mala alimentación que tuvo cuando estuvo en la cárcel, pues le daban muy poca comida, y mala.
Cuando le preguntamos qué pensaba en la cárcel, nos dijo: «En la comida; después del desayuno, uno ya comienza a esperar el almuerzo, porque siempre teníamos hambre». El trabajo en la cárcel no era muy duro, pero cansaba mucho: tenía que escoger pelos de cerdos durante horas y horas, para la fabricación de cepillos de zapatos. Mi formador tenía un sentimiento especial con aquellos cepillos. Cuando Dios bendice, bendice con la cruz. Así, estábamos casi acostumbrados a que Dios, de vez en cuando, nos mandaba una pequeña cruz.
En aquel tiempo, cuando rezábamos, podíamos cantar; también podíamos reírnos a carcajadas, hablar en voz alta, salir a dar paseos…Gozamos de bastante libertad durante casi un curso entero. Luego tuvimos que irnos a otro sitio. Es que los policías se enteraron de la existencia de un grupo de los nuestros, que vivían en otra montaña. Les capturaron a todos cuando estaban almorzando. En el camino a la comisaría, una feligresa vio a un seminarista en el jeep de policía haciéndole señales, así que subió corriendo adonde nosotros estábamos para avisarnos. Cuando llegó, estábamos preparando la cena. El formador, sin pensar ni un segundo, en seguida nos mandó huir. Bajamos de la montaña cruzando un bosque, de dos en dos. Todavía no éramos conscientes del miedo, nos parecía casi divertido aquello de huir corriendo de la policía. Hacíamos competiciones para ver quién corría más rápido…
Una vez salimos de la casa, los fieles de la aldea metieron piensos para los animales domésticos en la cueva, y echaron polvo en el cristal de la ventana, que siempre había estado muy limpia. Esa misma noche, subieron los policías, llevando perros, para capturarnos también a nosotros. Dios pensó que todavía no era el tiempo. Ya no había nadie allí. Tres meses después, nos reunimos en otra provincia. Nos dijo el Rector que los seminaristas detenidos recibieron una condena de tres años de cárcel, y que tenían que cavar piedras, ya que el sitio era montañoso y hacía falta construir caminos. En esta nueva casa, el formador nos dijo que fuéramos más prudentes y cautelosos, no sólo por nuestra seguridad, sino también por la de la familia que nos había acogido. Así que no podíamos hablar en voz alta, ni reírnos demasiado, y mucho menos salir de la habitación, para que no se enterasen los vecinos. Pero, no sé cómo, siempre acaban enterándose.
Por eso teníamos que cambiar de casa cada muy poco tiempo –como mucho, cada medio año–. Hasta el día de hoy, los seminaristas de mi diócesis siguen llevando este estilo de vida, huyendo de un sitio para otro. Cuando en alguna fiesta, como la Pascua, quieren cantar los chicos, el formador elige a uno o dos para que canten, y en voz baja…
La Iglesia en China lleva siglos de persecución. La sangre de los mártires, semilla de los nuevos cristianos, está brotando. Una primavera del cristianismo está llegando a China. Cada año, a pesar de la falta de libertad religiosa, miles y miles chinos se bautizan. Ahora más que nunca hacen falta misioneros intelectualmente bien preparados; tenemos que dar razones de nuestra esperanza a la gente. Para llevar a cabo esta misión, la Iglesia en Europa nos ha ofrecido su ayuda: muchos movimientos de la Iglesia quieren encargarse de la educación de los seminaristas chinos. Así, muchas diócesis han enviado a sus seminaristas a Europa para recibir una mejor formación y para que luego puedan servir mejor a la Iglesia. Lo que quiero es que la gente conozca un poco más cómo viven los seminaristas en China ahora, porque se habla mucho de la apertura de China, el desarrollo de China, incluso de la mejoría de las relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y China, como si en China hubiera libertad religiosa ya. Yo quería escribir un poco cómo estudian los seminaristas en China, porque estudian mucho.
Ciertamente tenemos pocos recursos para ello, pero estudian mucho, porque saben que la Iglesia lo necesita –me dolió mucho escuchar a un cardenal que dijo que el clero de la Iglesia clandestina es inculto–. El año pasado fui a China; la vida de los seminaristas sigue siendo como antes, no pueden hablar ni cantar en voz alta. El día de la Asunción de la Virgen, no se imaginan cuántas ganas tenían los chicos de cantar una misa a la Virgen, pero no podían; cerramos todas las ventanas y puertas en pleno agosto, para que pudieran cantar algo.
Se habla mucho de la Iglesia oficial o patriótica, y la Iglesia clandestina o fiel a Roma, pero la cuestión de fondo no está en esto, sino en el sistema político: para el comunismo no existe la persona, por consiguiente, ni sus derechos, y mucho menos la libertad religiosa. Queremos todos ver una Iglesia unida en China, pero es el Gobierno el que no lo quiere.
Al amable lector, le ruego que en su momento de oración se acuerde de los obispos y los sacerdotes que están todavía en la cárcel, y rece por los seminaristas, para que seamos aptos para el reino de Dios.
¡Recemos por nuestros mártires!
____________________________________________________________DESPEDIDA DE NANCY IRIARTE, Ex-ESPOSA DE HUGO CHAVEZ
Impresionante, muy Profunda y temprana despedida de Nancy Iriarte Díaz a Hugo Chávez; fue publicada el 9 de agosto de 2011 en uno de los periódicos venezolanos de mayor circulación “El Universal”
Algunas consideraciones sobre tu muerte:
No quiero que te marches de esta vida sin antes despedirnos, porque has hecho un mal inmenso a mucha gente, has arruinado a familias enteras, has obligado a legiones de compatriotas a emigrar a otras tierras, has vestido de luto a incontables hogares, a los que creías tus enemigos los perseguiste sin cuartel, los encerraste en ergástulas que no lo merece ni un animal, los insultaste, los humillaste, te burlaste de ellos, no solo porque te creías poderoso, sino inmortal... porque el fin de los tiempos no era contigo.
Pero llegó tu turno, los plazos se acaban, el término de tu contrato llega a su fin, tu "ciclo vital" se apaga poco a poco y no de la mejor manera; probablemente morirás en una cama, rodeado de tu familia, asustada, porque va a tener que rendir cuentas una vez que des tu último aliento, te vas de esta vida lleno de angustia y de miedo, allí van a estar los curas a quienes perseguiste e insultaste, los representantes de esa Iglesia que ultrajaste a placer, claro que te van a dar la extremaunción y los santos óleos, no una, sino muchas veces, pero tú y ellos saben que no servirá de nada, es solo para calmar el pánico que hace presa a tu alma ante el momento que todo lo define.
Mueres enfermo, padeciendo el desahucio, las complicaciones inmunológicas, los terribles efectos secundarios de las curas que prometieron alargar tu vida, tus órganos se van apagando uno a uno, tus facultades van perdiendo el brillo que las caracterizaba, tus líquidos y efluvios son colectados en bolsas plásticas con ese hedor a muerte que tanto te repugna.
Dime si en este momento, antes de que te apliquen una nueva inyección para calmar los dolores insoportables que padeces, vale la pena que me digas que no te pueden quitar lo bailado, ¡ah! los viajes por el mundo, los maravillosos palacios que te recibieron, las paradas militares en tu honor, las limousines, los títulos honorarios, los pisos de los hoteles cinco estrellas, las fastuosas cenas de Estado... dime ahora que vomitas la papilla de auyama que te tratan de dar las enfermeras, si era de eso de lo que se trataba la vida, pues ese brillo y el oropel ya no están entre los monitores y máquinas de resucitamiento que te rodean, esas marchas y aplausos ahora son tonos y alarmas de sensores que regulan tus signos vitales que se hacen más débiles.
¿Puedes escuchar al pueblo de tu país afuera de tu cuarto?... debe ser tu imaginación o los efectos de la morfina, no estás en tu patria, estas en otro lado, muy lejos, entre gente que no conoces... sí, estás muriendo en tu propio exilio, entre una banda de pilluelos a quienes les has tratado de entregar tu propio país, tus últimos momentos los pasarás entre chulos y estafadores, entre tu corte de aduladores que solo te muestran afecto porque les dabas dinero y poder, todos te miran preocupados y con rabia, nunca dejaste que ninguno de ellos pudiera tener la oportunidad de sucederte, ahora los dejas al descampado y tu país al borde de una guerra, ¿Era eso lo que querías? ¿Fue esa tu misión en esta vida? Olvídate del cuento de los pobres, ahora hay más pobres que cuando llegaste al poder, olvídate de justicia e igualdad cuando prácticamente le entregaste el país a una fuerza extranjera que ahora tendremos de desalojar a la fuerza y a costas de más vidas.
Tengo la leve impresión que ahora sabes que te equivocaste, creíste en un cuento de camino y te creíste revolucionario, y por ser revolucionario... inmortal, convocaste a tu lado a los muertos, a tus héroes, a esos fantasmas que también creíste con vida, a Bolívar, al Che, a Fidel, al Marx que nunca conociste y que recomendabas su lectura... el andar con muertos te llevó a la magia y a los babalaos, te metiste a jurungar tumbas, y a ofrendarle a una corte de demonios y malos espíritus que ahora te acompañan... ¿Sientes su presencia en el cuarto? Vienen a cobrar, a recoger lo único que tenía valor en tu vida y que tan malamente apostaste por la oscuridad y el mal, tu alma.
Bueno, me despido, solo quería que supieras que pasarás a la historia como un traidor y un cobarde, que no rectificaste cuando pudiste, te dejaste llevar por tu soberbia, por tus ideales, por tu ideología renunciando a los más preciado, a tu libertad y a la libertad de los otros, y la libertad nos hace humanos.
"El Socialismo sólo funciona en dos lugares:
en el Cielo, donde no lo necesitan,
y en el Infierno donde ya lo tienen"
Nancy Iriarte Díaz
____________________________________________________________La necesaria pacificación y reconciliación
La historia no puede ser reconstruida según el color de un dogmatismo faccioso e interpretaciones sesgadas y asimétricas...
____________________________________________________________¡Arde Jujuy!
Las distintas organizaciones que se manifiestan por la “reivindicación de las luchas populares”, no tienen como finalidad la justicia social. Sus consignas: “¡Piquete y Cacerola, la lucha es una sola!”; “Cortes y cacerolazos el País pide a gritos “Justicia y Trabajo”; poseen un condimento, una carga ideológica que los conduce a un enfrentamiento no concluido en el pasado.
Tras una premisa cierta y justa, como es el pan, la salud, la vivienda, la educación, el trabajo, se oculta una intención política, la lucha de clases. Las personas que tienen insatisfechos estos bienes esenciales son, eventualmente, captadas por agentes que, mediante el predicamento de pretéritas ideologías los reclutan en agrupaciones disciplinadas y organizadas para la lucha, para el combate a largo plazo. Así constituidas estas agrupaciones se caracterizan por tener una identidad piquetera, un espíritu conformista –poco pero seguro.
Profundizando sus estructuras encontraremos los siguientes movimientos:
Coordinadoras de Desocupados. Militantes de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) y del Partido Comunista Argentino (PCA). Mientras que en la Corriente Clasista y Combativa (CCC) se advierte la presencia del Partido Obrero (PO). Es conveniente destacar que las citadas organizaciones, si bien están relacionadas, se diferencian en su ideología y ambiciones políticas.
La CTA surge como un aparato sindical, cuya línea intermedia o franja gris tiene una orientación seudo-trotskista. En cambio su dirigencia está formada, principalmente, por profesionales que elaboran las estrategias y los cursos de acción. Poseen una estructura nacional y un importante reconocimiento internacional sobre todo en Latinoamérica. Su objetivo es netamente político y social, luchan por lograr un espacio de poder mediante la creación de un reciente movimiento político – social, lanzado a principios del 2003 en Mar del Plata. Actualmente cuentan con más de 700 mil afiliados y con más de 200 organizaciones que le responden.
La CCC es una agrupación que responde al Partido Comunista Revolucionario y nace como consecuencia de la aplicación de un sistema económico cruento. Como lo indica su denominación es la clase, el segmento social que ha quedado marginado y excluido del bien llamado modelo de hambre. Sus dirigentes poseen un nivel medio y el objetivo es solamente reivindicatorio.
El PO corre por un andarivel distinto, deviene de antiguas agrupaciones de ultraizquierda y su ideología es claramente trotskista. Es una organización políticamente resentida y con una gran ambición de poder que la empuja como idea fuerza. Su objetivo es llegar a gobernar por la fuerza y subvertir los valores nacionales.
Existen además otras organizaciones como la agrupación Quebracho, Patria Libre, y los neoanarquistas. Todas con ideologías parecidas, siendo las últimas las más combativas.
Hasta aquí las fuerzas que operan detrás de las agrupaciones populares y piqueteras. Sin embargo, la preocupación debe estar centrada en las tácticas de lucha concebidas por el Movimiento Bolivariano y adoptadas por aquellas organizaciones para actuar política y militarmente; donde, la acción directa, ejercida a través de la movilización de importantes masas populares –ver video Tupac Amaru- produce efectos contundentes en la opinión pública y en el gobierno. El citado movimiento bolivariano fue infiltrado en la Argentina a comienzos del 2003 de la mano de Hugo Chávez, con el consentimiento del gobierno Kirchnerista; baste recordar las reiteradas visitas que realizaba el presidente Venezolano, durante las cuales efectuaba charlas populares de adoctrinamiento en distintos escenarios. Cabe destacar como parte de su estrategia la captación de los movimientos indigenistas siendo uno de ellos el ya mencionado Tupac Amaru liderado por Milagro Sala, entre otros.
Estas hordas se movilizan en distintos puntos del país ejecutando cortes de ruta, toma de organismos y otras operaciones. Desde esos lugares ejercen, con su masiva prepotencia, la presión política necesaria para que el gobierno ceda a sus exigencias. Existe y asiste para los desposeídos el derecho a reclamar justicia, más aún cuando inescrupulosos gobernantes provocan con sus políticas clientelistas dichas injusticias. Mas aquí, el interés se orienta a correr el velo y poner al descubierto a los manipuladores que se valen del sufrimiento del pueblo para satisfacer sus hediondas ambiciones. Ideólogos, políticos y funcionarios que, perteneciendo a uno u otro bando, oficialismo y oposición, sostienen o sostuvieron con dinero –subsidios desvirtuados– a estas agrupaciones, asignándoles planes “Trabajar”, “Jefas y Jefes de familia” y otras asistencias a fin de, utilizarlos como arietes en sus disputas personales o partidistas.
¿Cómo, si el mismo gobierno crea y asiste a las bandas. Entonces, por qué es presionado por éstas? Obvia pregunta; la respuesta es, que llegado un determinado momento la fuerza que adquieren es incontrolable y el objetivo político la toma del poder, la comunización (Ver "Camino al comunismo").
Pero falta aún considerar una consecuencia mucho más nociva para toda la sociedad, como es el desinterés que va ganando el ánimo de esta gente para no trabajar, sino para continuar viviendo de las dádivas políticas. Lejos de solucionarse estos graves problemas, crearán no pocos compromisos a los futuros gobiernos, alentando el fantasma de la in gobernabilidad.
Sintetizando: a) Los desposeídos y marginados de la sociedad son captados por ideólogos que aprovechan el caos y la anarquía para conquistar espacios de poder a través de la lucha. b) Los partidos políticos negocian, sostienen o simpatizan, según su ideología, con estas agrupaciones, para usarlas como fuerzas de choque y conseguir sus votos. c) El gobierno cede a todos sus reclamos por temor a los desbordes sociales y a la desestabilización.
Conclusión: además de los conflictos y violencia que soportamos en el presente, en la República Argentina se está insinuando una forma de libanización del país; vale decir, que algunas regiones del territorio nacional corren el riesgo de ser controladas por grupos o bandas que exigirán a sus ciudadanos el pago de un peaje, de un canon para poder transitar o trabajar. El precio por alentar este tipo de barbarie es la ingobernabilidad.
Es notorio el retroceso político de nuestro país a partir de un fenomenal aumento del clientelismo, al pasar de 1 al 18% de la población económicamente activa viviendo de subsidios (datos del año 2003).
Los saqueos
Por último cabe reflexionar sobre los saqueos. A priori, es la culminación de un ciclo que se repite de manera irregular, igualmente, en gobiernos de distinto signo político. Es decir que, dada una serie de circunstancias socioeconómicas desfavorables, las clases más postergadas o excluidas se pronuncian a través de un estallido. Es como una infección social que culmina con una erupción violenta.
La gente, harta de privaciones y muchos con hambre, irrumpe en los supermercados y almacenes para procurarse la satisfacción de sus necesidades básicas.
Desmenuzando el problema lograremos razonarlo. Pues aquí, a diferencia del punto anterior, no aparece un condimento ideológico y tampoco concurre una organización previa. Sí, están presentes agitadores circunstanciales que ejercen una cierta influencia para juntar a las personas en grupos. Conformados dichos grupos se produce la masificación. Entonces, esa masa, motivada por sus insatisfacciones, actúa violenta y descontroladamente. Por lo tanto, su comportamiento es muchísimo más peligroso que una agrupación popular. “En los motines que la escasez provoca suelen las masas populares buscar pan, y el medio que emplean suele ser destruir las panaderías” decía Ortega y Gasset en su obra “La rebelión de las masas”.
Para un mejor entendimiento de este terrible problema citaremos la teoría de Maslow sobre la motivación. Abraham Maslow buscaba explicar por qué ciertas necesidades impulsan al ser humano en un momento determinado. ¿Por qué dedica mucho tiempo y energía una persona a la seguridad personal y otra a ganarse la estimación de sus semejantes? Resulta que, las necesidades humanas están ordenadas en una jerarquía, desde la más apremiante hasta la menos urgente. En orden de importancia, éstas son: las necesidades fisiológicas, de seguridad, sociales, de estima y de autorrealización. La persona intentará satisfacer primero las necesidades más importantes. Cuando la persona tenga éxito en la satisfacción de una necesidad urgente, ésta dejará de ser motivadora por un momento, y estará motivada para satisfacer la necesidad que ocupe el siguiente lugar en importancia. Un hombre hambriento (necesidad 1) no tendrá ningún interés por los últimos acontecimientos científicos (necesidad 5), ni tampoco en la forma como otros lo ven o si tiene estima o no (necesidades 3 ó 4). Pero, a medida que se satisface cada necesidad apremiante, la segunda en importancia entrará en juego.
Concretamente, una persona motivada está lista para actuar. La percepción que tenga de la situación influye en la manera cómo actúa. Quiere decir, que aquel hombre hambriento tiene que satisfacer una necesidad vital, para él y su familia; por lo tanto está motivado para actuar y, su percepción de la realidad, la situación, le indicará robar, saquear y hasta matar, si lo amenazan las circunstancias.
Estos acontecimientos pueden llegar a ser cruentos, dado que la violación de la propiedad privada puede incitar a la justicia por mano propia, como, lamentablemente, ha sucedido en el pasado reciente.
Lejos de sembrar el pánico, este Blog intenta advertir sobre lo que puede llegar a acontecer en caso de continuar los hechos acaecidos en la provincia de Jujuy y su proyección a nivel nacional. El deber más elemental y prioritario de un gobernante, funcionario o dirigente es la previsión.
____________________________________________________________La religión de los argentinos
Mons. Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata, comentó una encuesta recientemente publicada sobre “Los Argentinos y la Fe” señalando que si bien “las encuestas tienen un valor relativo” la mencionada “ha producido resultados desconcertantes y que hacen posibles diversas interpretaciones”.
Afirmó que “aparece una idea de la fe que no corresponde a la concepción católica de esa virtud teologal” y que supone que “habría que pensar que una buena parte de los argentinos que se declaran católicos profesan una especie de subjetivismo religioso”.
Agregó que “esto plantea otra cuestión, que es la relación difícil, ambigua muchas veces, entre fe y actitud religiosa. Entre la fe en el sentido católico de la palabra” y “la actitud religiosa”. Explicó que “esta difícil relación entre fe y actitud religiosa se puede advertir en muchas de las formulas tradicionales de la piedad popular. Me llamó la atención que en esta encuesta, felizmente, Nuestro Señor Jesucristo le gana por 5 puntos a San Expedito. Esto quiere decir que no hay allí un discernimiento bien claro de hacia dónde se tiene que dirigir el gesto religioso de la devoción, la adhesión de amor y de confianza”
El prelado comentó que lo más significativo de esa investigación sobre la fe de los argentinos “es que falta, al parecer en esa inmensa mayoría que se declara católica, una identificación con la Iglesia, un sentido de pertenencia a la Iglesia. Al contrario, la Iglesia aparece como algo distinto de ellos, de aquellos que se profesan católicos. En todo caso la Iglesia será la jerarquía, la organización institucional, el cuerpo dogmático, los preceptos morales, etc.”
Y dijo que “ser católico implica reconocerse espontáneamente como miembro de la Iglesia, ámbito en el cual se vive en comunión de fe y de caridad participando del culto de Dios en la celebración de los sacramentos. A los pastores de la Iglesia les corresponde guiar a los fieles en nombre de Cristo; ése es un servicio de amor. Desde el principio, desde el tiempo de los Apóstoles, ha sido así.
Monseñor Héctor Aguer también dio cuenta que en la encuesta “se registra una cierta incomodidad, en los que allí se llaman católicos, cuando la Iglesia hace presente sus verdades en el ámbito público, como que este individualismo y este subjetivismo religioso va acompañado de una especie de laicismo. Como si la Iglesia no tuviera el derecho y el deber de expresar con claridad la verdad sobre el hombre y los valores éticos fundamentales”.
Por último destacó que “la clave” es “ofrecer a todos los fieles medios concretos de crecimiento en la fe y en la vida espiritual y recordar siempre sin miedo las exigencias del Evangelio”. “Si aceptamos los datos de la encuesta, me parece que para mejorar las cosas la solución no es que la Iglesia se haga simpática, que mejore su sistema de comunicación, que intente no confrontar ni enemistarse con nadie, para así sumar adhesión y contento masivo. Lo que debiéramos hacer nosotros, los pastores de la Iglesia, es acompañar mejor a las familias que bautizan a sus hijos, preocuparnos de que la catequesis en las parroquias y en los colegios sea más efectiva, es decir sea lo más completa posible y encamine a una perseverancia en la vida cristiana. Importa mucho formar bien a los adolescentes y jóvenes en las virtudes fundamentales hoy frecuentemente olvidadas”.
____________________________________________________________¿A dónde va la Argentina?
Que nuestra nación perdió el rumbo es un hecho obvio advertido por el más desinformado de los ciudadanos. No es éste el problema que preocupa, el problema es hacía dónde nos dirigimos. Muchas veces se ha recurrido a la tragedia del Titanic para ejemplificar alguna situación de zozobra. Pero ese gigantesco barco tenía gobierno y una desgraciada contingencia lo envió al fondo del mar. La Argentina no tiene gobierno. Tiene una suerte de parodia digna de una comedia interpretada por Peter Sellers. Además, navega en un ambiente muy convulsionado en el cual pujan fuerzas siniestras cuyo objetivo principal es el logro de fortunas personales y la perpetuación en el poder. Sin entrar en mayores detalles, por todos hartamente conocidos, este es el escenario en que debemos actuar. Ahora bien, como es de esperar, no existen proyectos ni políticas de corto, mediano y largo plazo destinadas al crecimiento, desarrollo y engrandecimiento de la nación. Sí existe una planificación y una ejecución perfectamente diseñada para conquistar los repugnantes objetivos citados más arriba. Planes que respondieron y responden a ideologías donde la violencia asegurará el establecimiento de un “nuevo orden”.
El buen cine siempre muestra lo mejor y lo peor del ser humano como de sus empresas. En este sentido la película “Gladiador” de Ridley Scott ilustra a la perfección la Argentina actual. La corrupción generalizada de la clase política de Roma, unida a un enfermizo y mediocre ejercicio del poder, le lleva la muerte al pueblo mientras es alimentado con “pan” y entretenido con el “circo”. La mediocracia y prepotencia del ejecutivo, vulnerando reiteradamente la Constitución Nacional, junto con los mal llamados subsidios –en realidad asistencialismo- porque no promueven nada y el fútbol para todos, entre otras miserias impresentables de la televisión, recrea a la Roma imperial de Marco Aurelio. Pero, lo más patético es que el pueblo los adora, los sigue votando. Roma no late en el mármol del senado, late en la arena del circo.
La acción política inspirada en Maquiavelo y Gramsci –neomarxista- respectivamente, nos condujeron, muy sutilmente, a una actualidad signada por: el embrutecimiento intelectual del hombre; la destrucción de las instituciones; la dilapidación del patrimonio nacional; el desmantelamiento de la industria; la persecución ideológica y religiosa y la degradación social entre otras grandes calamidades.
Nadie se hace santo ni pecador de un día para el otro. Para llegar hasta aquí vivimos un proceso que abarcó los últimos sesenta años de nuestra historia. Pues el gran denostado de este período, el Gral. Perón, había construido un país que aspiraba a la independencia económica, la soberanía política y la justicia social. Hoy contamos con todos los elementos de juicio, hoy es el futuro que ayer no se conocía, para valorar y confrontar su gobierno con la actualidad nacional. En el inicio del citado proceso la República Argentina tenía: industria pesada; líneas marítimas y aérea propia; los mejores hospitales y centros de salud de latinoamérica; energía atómica; excelencia educativa; Fuerzas Armadas; explotación petrolera y minera; el granero del mundo y, dignidad. A partir de la gran revolución “Libertadora” en adelante, comenzó sistemáticamente la destrucción. Intereses extranjeros –liberales y comunistas- y traidores, sucesivamente, se aliaron para vaciar a la república. Algún mal informado querrá responsabilizar a Perón por lo acontecido en su tercera presidencia. Sabemos muy bien que en esa época comenzaron a actuar los delincuentes de hoy; los que portaban armas como los que usurparon al país. La referencia a delincuentes también alcanza a los que integraban su propio gobierno. Quien ha leído sabe de qué se trata todo esto. Quien no ha leído que se informe. Un hombre que deja un legado político como es el “El Proyecto Nacional” leído en la apertura de sesiones del Congreso Nacional el 1º de mayo de 1974, no puede desear otra cosa que engrandecer a su patria.
Todo mundo habla de las próximas elecciones presidenciales. Si Cristina, si Duhalde, si Alfonsín (h). Todos acotados en la coyuntura. Nadie eleva la visión para siquiera vislumbrar hacia dónde nos dirigimos. Para cuestionarse cuál será el destino de la Argentina a largo plazo. Nadie ve el “Iceberg”. El escudo de Chile reza “Por la razón o por la fuerza” la bandera de Brasil “Ordem e Progreso”; sería interesante saber qué nos define como pueblo, como nación.
¿A dónde va la Argentina? Sería conveniente que nos dirijamos a recuperar nuestra República.
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LA UNIÓN HOMOSEXUAL ES LEY
¿Y ahora qué, se terminó todo? En mi humilde opinión como católico y como padre tengo la obligación de hacer un examen de conciencia para darme y darles a mis hijos una respuesta coherente sobre todo lo acontecido. Considero que como Iglesia también deberíamos elaborar un “mea culpa”; pero esa tarea se la cedo a nuestros pastores que están mejor formados e informados.
Da la impresión que esto finalizó así, con el triunfo de una minoría, imponiendo un estilo de vida y de sociedad contra-natura. Bien, lamentablemente, en nuestro país hoy ha comenzado la destrucción, la desintegración de la persona. El término “integro” quiere decir entero, que no carece de ninguna de sus partes. Entero es todo aquello que no esta partido, separado. Ser una persona integra es ser una persona alineada y unida a Dios. Es ser una persona que cree, ama y respeta a su creador contribuyendo con su obra y trabajando en la realización de su Plan Divino.
No podemos ser tan ignorantes, tan irresponsables de aceptar este acontecimiento como si se hubiera perdido o ganado un partido de fútbol. La conclusión de este profundo y meditado examen de conciencia, producto de mi insomnio, es el siguiente:
- Que los católicos no hemos dado testimonio evangélico con nuestra vida.
- Que siendo la gran mayoría de los ciudadanos bautizados nos hemos alejado de Dios hasta enfriar o desaparecer nuestra Fe.
- Que nos hemos dejado seducir por un mundo materialista y hedonista, donde lo prioritario es satisfacer nuestros deseos y apetitos como si fuésemos animales, según el pensamiento Aristotélico.
- Que nuestros pecados como esposos y esposas dentro del matrimonio consagrado por Dios nos llevó, primero al divorcio y luego a la destrucción de la familia.
- Que nos despreocupamos por la educación y formación cristiana de nuestros hijos.
- Que no nos interesa ni preocupamos por la cosa pública. No asumimos compromisos cívicos, por ende, los espacios vacíos son ocupados por personas incapaces y mediocres.
- Que el hombre de hoy sólo reclama derechos y no cumple deberes, decía Ortega y Gasset.
A mi entender estas son las causas principales que derivaron en la sanción de una ley contra-natura. Las causas secundarias serían interminables. Por consiguiente, no podemos ahora rasgarnos las vestiduras y quedarnos en un irresponsable lamento echándole la culpa a nuestros representantes. Nosotros somos los primeros responsables. Nos acordamos tarde de rezar y de pedir la ayuda divina. Dios nos dejó librados a nuestra suerte. “No son los que me dicen: «Señor, Señor», los que entrarán en el Reino de los Cielos, sino los que cumplen la voluntad de mi Padre que está en el cielo” (Mt 7;21)
¿Alguien se detuvo a pensar por qué Dios le revela a san Juan el Apocalipsis?
Dios ama la vida, no desea que el mundo termine destruido por grandes catástrofes, es un grave error adjudicarle al Creador tales designios. Si hubiéramos construido su Reino, aquí en la tierra, como El nos enseñó, podríamos afirmar que el Creador no destruirá a su creación. El libro de la Revelación lo estamos haciendo cumplir nosotros pues a ese destino nos encaminamos con las elecciones de vida que hacemos a diario. La sanción de la Ley de Matrimonio Homosexual es sólo un paso más hacia ese trágico y doloroso final.
Corolario: Dios nos quiso dar una lección a todos los argentinos. Ayer nos dijo: recen, pidan perdón y se salvarán de ser destruidos. En nosotros está nuestro destino de elegir ser Nínive o Gomorra. “El que tenga oídos para oír que oiga”.
Julio de 2010
ORACIÓN A LA "SAGRADA FAMILIA"
Querida Sagrada Familia
sobre la familia argentina
se cierne una mortal amenaza,
el “padre de la mentira”
está oscureciendo la mente
y confundiendo los corazones de los hijos de Dios.
Hoy, en nuestro querido país,
la mentira se disfraza de verdad incuestionable.
Se pretende legalizar lo antinatural y moralizar lo inmoral.
Se pretenden derechos humanos que tuercen derechos divinos;
violando el sacramento del matrimonio con impuras relaciones.
Depravados egoísmos se arrogan derechos sobre nuestros niños.
Imploramos a Jesús, el hijo de Dios,
para que nos fortalezca en la tribulación,
para que aumente nuestra Fe,
para que ilumine a nuestros legisladores
y, para que perdone a sus enemigos, porque no saben lo que hacen.
Imploramos a la Santísima Virgen María, nuestra Madre,
para que revista a la mujer con virtudes de femineidad y maternidad.
Imploramos la intercesión de san José,
para que dignifique al varón con un carácter masculino, viril y paternal.
Sagrada Familia rogad por nosotros. Amén.
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